El pH (potencial de hidrógeno) es una medida fundamental que determina el grado de acidez o alcalinidad de un sustrato o medio de cultivo, y desempeña un papel crítico en la absorción de nutrientes por parte de las plantas. El pH puede variar desde ácido (pH bajo) hasta alcalino (pH alto), y cada rango tiene un impacto directo en la disponibilidad de nutrientes esenciales para las plantas.
Cuando el pH es demasiado bajo (ácido), algunos nutrientes como el calcio (Ca), el magnesio (Mg) y el fósforo (P) pueden volverse menos disponibles para las plantas. Esto puede llevar a deficiencias nutricionales y problemas de crecimiento.
Por otro lado, cuando el pH es demasiado alto (alcalino), otros nutrientes como el hierro (Fe) y el manganeso (Mn) pueden volverse menos accesibles para las plantas, lo que nuevamente puede provocar deficiencias nutricionales y síntomas de estrés en las plantas.
El producto "pH -" se utiliza para disminuir el grado de acidez en el sustrato o medio de cultivo, lo que aumenta el pH y hace que el entorno sea menos ácido y más alcalino. Este ajuste del pH es esencial para asegurar que las plantas tengan acceso a los nutrientes que necesitan en la forma adecuada y en la cantidad correcta.
Mantener el pH adecuado es fundamental para el éxito del cultivo, ya que garantiza que las plantas puedan absorber los nutrientes de manera eficiente y evitar problemas de deficiencia nutricional. Ajustar el pH también puede ser importante para adaptar el medio de cultivo a las necesidades específicas de las plantas, dependiendo de la fase de crecimiento en la que se encuentren.
En resumen, el producto "pH -" se utiliza para reducir el grado de acidez en el sustrato o medio de cultivo, ajustando el pH para mejorar la disponibilidad de nutrientes esenciales para las plantas. Este ajuste es crucial para el crecimiento saludable y el rendimiento óptimo de las plantas en la agricultura y la horticultura.
- Función
- Disminuir
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